Daniel Goleman, a quien muchos recordamos por haber acuñado el concepto de la Inteligencia Emocional ha profundizado en su estudio de las habilidades de pensamiento que están abriendo profundas brechas entre quienes hoy son capaces de identificar y aprovechar algunas de las infinitas posibilidades que la tecnología nos trae y quienes viven distraídos a partir de las constantes ráfagas de datos a las que nos exponemos.
Coincido con quienes estudian y creen que la gran habilidad de nuestros tiempos es solo una: ENFOCARSE.
El mundo hoy es de quienes consiguen saltar la barrera de las distracciones y dominan su pensamiento para concentrarse en lo que su libertad (o lo que nos queda de ella) elige y no lo que los algoritmos nos ponen enfrente.
Solo quien está siendo capaz de poner foco logra obtener del entorno datos relevantes para tomar decisiones.
Daniel Goleman habla de lo que me parece un super poder en la era de las distracciones, él lo llama Metacognición: la capacidad de saber lo que no sabemos.
Cuando observamos con atención plena, silencio y apertura (cosa que rara vez ocurre cuando estamos distraídos y engullendo cuánto video toca a nuestra puerta una notificación tras otra) podemos vislumbrar luces que apuntan a ideas, conceptos, personas o formas de operar que no conocemos, pero ahora sabemos que existen.
Saber que algo existe, aunque no lo conozcas, ya es una luz.
Es la chispa de la creatividad, la curiosidad y las ganas de aprender.
Es la energía que de niño tuviste al saber que algo se guardaba en el armario, aunque no sabíamos qué era.
Sabías que había algo y eso ya era suficiente para querer buscar.
¿Cómo vemos hoy los armarios de información?
En un mundo con tantos estímulos y acceso a demasiada información a través de la pantalla, ésta se puede convertir en tu mejor aliado o tu peor enemigo. Te explico:
Vemos tanto a través del mundo digital que se convierte en una fuente infinita de datos e ideas… pueden ser una cascada de distracciones o una luz que te permite ver nuevas posibilidades. En LinkedIn, Instagram o TikTok puede estar tu próximo gran negocio, tu futuro socio o tu mayor fuente de procrastinación.
¿Cuál es la línea que los divide? La atención que logremos poner y el foco con el que observemos.
Para mí, por ejemplo, salir por unos días de mi entorno con la intención puesta en observar, escuchar y sentir ha sido una puerta a ideas que no sabía que no tenía; formas de operar que no sabía ni que existían y hoy quiero incorporar a mi vida; lugares con dinámicas que nunca había experimentado y hoy sé que deseo incorporar; negocios con potencial de facturación que no creía a mi alcance y hoy quiero buscar… En fin, hoy sé que hay cosas que no sé, pero quiero buscar.
Cuando pones atención y te enfocas, aparecen huecos que dan luz a esos espacios de «metacognición», y comienzas a saber lo que no sabes, comienzas a crecer.
Ahora sabes que hay algo que no sabes.
¿Qué opinas?
IG: @dianatorres.mx
