¿Qué tienen en común estas redes sociales? Que ambas son el escenario para «venderte» y ser «elegido» de entre un mundo de opciones de personas que muestran sus mejores rostros y perfiles, pero, ¿qué podemos aprender en común en este esfuerzo por «venderte»?
✅ Mostrarse lo más natural y real posible disminuye el riesgo de expectativas no cumplidas en ambos lados de la relación y disminuye el estrés en el encuentro real. Quedar a tomar algo con una persona que solo ha visto tu mejor foto con super maquillaje puede ser tan estresante como ir a una entrevista con alguien que vio un perfil inflado. La relación más duradera será la basada en una selección realista de lo que eres.
✅Presentarte mostrando lo que eres, no solo lo que sabes hacer. Las personas y empresas que buscan una relación buscan personas reales: con aficiones, gustos, disgustos, planes y entornos sociales. Deja ver algo más allá del CV (personal o laboral) y permite que las redes sepas quién está detrás de una buena descripción de perfil.
✅Toma la iniciativa y entabla conversaciones valiosas para la red. La foto y el CV no venden solos. Comenta, opina, aporta y hazte visible en una red plagada de personas «ideales».
✅Protege tu autoestima del algoritmo. Como toda plataforma social, al llegar tendrás muchos likes e invitaciones, luego bajará el ritmo y eso no significa que tu perfil sea menos valioso o de repente seas menos atractivo, significa que el algoritmo está haciendo tu trabajo. Mantente atento a tus reacciones emocionales cuando recibes un comentario o reacción digital y recuerda que es solo un perfil virtual de ti y que nunca será una buena escala para medir lo que vales o eres como persona.
¿Encuentras otra lección compartida? ¿Quién por aquí en ambas redes que nos ayude a encontrar similitudes?
